- Tienes frio? – pregunte sintiéndolo temblar a mi lado
- Un poco… - sus dientes castañearon, negando lo que acababa de decir – esta…bi…bien…tengo frrrrio…Es que…Kyuuuhyun…no aviso…
Me reí ante su extraña forma de hablar y lo atraje hacia mí cubriéndolo con mi cuerpo y abrazándolo por detrás – mejor? – pregunte, el solo asintió con una sonrisa
No tienes frio? – pregunto viendo a los chicos que estaban entrando al mar como si fuera lo más normal del mundo a estas horas de la noche – no vas a entrar con ellos?
- No creo que sea necesario…además tienes frio… - el otro rápidamente puso una cara de culpa y se intentó separar de mí, pero lo sujete con fuerza – No quise decir eso…solo que no tengo ganas ahora…Kyu está loco al hacer esto…
Reímos ante lo que acababa de decir, tenía razón. Kyuhyun salía siempre con ideas locas como esta, de salir a la playa a estas horas de la noche, y nosotros siempre terminábamos aceptando. Era uno de esos días donde le daba ataques de felicidad y quería hacer lo que se le antojaba, y para mala suerte, siempre estábamos incluidos todos nosotros.
- Cual crees que pueda ser su siguiente locura? – pregunto aun riendo
- Hmm…ir a correr con motos en el lodo…ah no, eso ya lo hicimos…aparecer en España cuando despertemos? – bromee, provocando que aumentara más su risa.
- Y tu… - pregunto de repente, sin voltear a mirarme – cuando terminaras haciendo locuras como él?
- Hmm…pues, creo que ya no estoy para eso…
- Te estas llamando viejo? – se burlo
- Yah~! – Le pellizque un costado, haciendo que se doblara de una forma graciosa entre mis brazos – Digo que no tengo necesidad de hacer locuras para ser feliz…
- Entonces ya lo eres? – siguió interrogando, gire a mirar a los chicos que ya estaban completamente en el mar y jugaban como unos niños.
Lo pensé por un momento. Claro que era feliz. Estaba en la completa plenitud de mi felicidad. El grupo seguía más unido que nunca, mi carrera actoral estaba creciendo rápidamente y nuevas puertas se me estaban abriendo, “Twosome Place” estaba andando muy bien y estaba pensando abrir otra sucursal, pero sobre todo mi vida personal estaba en las nubes. Tenía a la persona más genial y hermosa como mi pareja. Si lo pensaba mejor, era gracias a esa persona que toda mi vida estaba en un estado completamente de tranquilidad y equilibrio. Tenía que aceptarlo; aquella persona era mi felicidad, todo lo que le daba sentido a todo lo demás.
- Si – respondí – creo que ahora me siento una persona realmente feliz…
Vi que sonrió con suficiencia y no me quede atrás – Tu…también eres completamente feliz? – pregunte
Al igual que yo, parecía procesarlo un momento, para luego girarse y mirarme a los ojos – créeme, ahorita mismo soy la persona más feliz que pisa esta tierra – susurro, mostrándome una hermosa sonrisa y se separándose de mí, acto seguido camino hacia los locos de mis compañeros quitándose el polo en el camino y corriendo hacia ellos.
- Que no tenías frio?! – grite
Él se volvió y me dedico otra sonrisa mientras soltaba un grito y se lanzaba al mar.
Definitivamente, a veces no podía entender a Lee Donghae, pero que podía hacer, así lo amaba, de esa manera se comportaba aquella persona, mi felicidad entera.
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